Hexagrama 35, el analemma, la lemniscata, la cinta de Moebius.

Si se toman fotografías del cielo a la misma hora y en el mismo lugar a lo largo de todo un año
y luego se superponen con exactitud se ve esto en el cielo, el analema del sol que también es la lemniscata de la matemática.
Una curva famosa con nombre propio que cualquiera puede hacer de forma tridimensional si corta una tira de papel angosta, toma ambos extremos con los dedos de ambas manos, los enfrenta, gira uno de los extremos 180º y los pega superponiendo los extremos. Lo que uno tiene en las manos es una Cinta de Moebius, la manifestación tridimensional de la  lemniscata y el analema del Sol.

Fui a buscar una explicación matemática de lo que sucede porque el recorrido anual de la Tierra alrededor del sol es una elipse, pero, si la vemos de esta manera -en cada punto del cielo a lo largo del año-,  es una lemniscata para cada punto del cielo.
Un signo que se puede ver en el cielo, el hexagrama 35, el sol que ha salido e ilumina nuestro mundo terrestre todos los días a la misma hora. El 35 es el hexagrama que te dice "el sol sale todos los días y brilla para todos" El analemma solar.

Algo como la canción de Serrat que amamos tanto: https://youtu.be/EEt-XcqQz4A


Encontré este artículo: http://gaussianos.com/no-lo-llames-infinito-llamalo-lemniscata/

Rescato lo más simple y fácil de allí:

"Elipse: conjunto de puntos que cumplen que la suma de las distancias a dos puntos dados, denominados focos, es constante.
Lemniscata: conjuntos de puntos que cumplen que el producto de las distancias a dos puntos dados, denominados focos, es constante.

Como veis, cambiando suma por producto pasamos de una elipse a una lemniscata."

Y me pregunto, ¿cómo pasamos a la Cinta de Moebius? Es una dimensión muy extraña la de la cinta de Moebius, si sigues con el dedo una de las caras de la cinta comprobarás que esta cinta es tridimensional, porque la manipulas como a otro objeto cualquiera, pero tiene una sola cara. Tiene dos caras que puedes ver con toda claridad, pero también tiene una sola. Y es un objeto, es decir es tridimensional también.

No quiero ni pensar en su expresión matemática, pero alguna potenciación habrá acá porque en parte es tridimensional, en parte tiene dos dimensiones y en parte una sola dimensión. Cosa que te vuela la cabeza y supongo que a los matemáticos les costó resolver y resolvió el famoso Moebius.

Me ha resultado muy oportuno para esta fecha, 30 de diciembre (no importa el año, porque se trata de infinito aunque a los gaussianos no les guste).

Supongamos que sacamos esas fotos para lograr el analemma del sol sobre nuestra cabeza comenzando este domingo 1º de enero de 2017 a las 10:30 hs de la mañana, esa hora que se asocia al hexagrama 35, la media mañana.
Lo hacemos para saber cuánto sol y caballos recibimos a lo largo del año 2017. Porque somos cabezones y somos de esos que pensamos que nuestro mundo tiene muy poco sol y muy pocos caballos, porque vivimos encerrados en el 36, La Luz Herida, ese hexagrama que te dice que no hay sol ni caballos para vos.

Lo hacemos desde un punto fijo en nuestra ventana que mira al norte si vivimos en el hemisferio sur y que mira al sur si vivimos en el hemisferio norte de la Tierra. Si vivimos entre ambos trópicos tenemos que cambiar de ventana siguiendo al sol.
Sacamos esa foto todos los siguientes días domingo, durante todo el año 2017. Propongo el domingo porque el domingo es el día del Sol, la estrella que nos ilumina y nos da vida, la que está arriba de Tierra en este hexagrama.
Pasado el año tenemos nuestro Analema del Sol personal-comunitario. Ese que se repite todos los años para cada uno de nosotros.
Nuestro 35, nuestro mundo diurno; como el 36 es nuestro mundo nocturno.

Li sobre Kun, Fuego (Sol, Conciencia, comunidad, el ojo abierto, muerte porque consumimos nuestra vida), sobre Tierra.
El hexagrama 35, Prosperar (como prosperan las plantas al sol) Progresar (como el Sol progresa por su camino en el cielo dibujando el analemma sobre mi cabeza y sobre la tuya a lo largo del año).

Dibujando el analema sobre mi cabeza...! 
Vienen imágenes a mi mente, de los Arcanos Mayores del Tarot. Dos de ellos tienen un analema sobre la cabeza. 
El 1, El Mago y el 11, La Fuerza.  

Parece ser una aventura infinita de la Conciencia, ser herida y volver a iluminar y calentar nuestra vida.  Caer y levantarse, una y otra vez. Tal vez hay una pista en el hexagrama 36, el Sol no se ha ido, sólo se ha ocultado bajo Tierra, ya volverá. Sólo son ciclos cósmicos y personales a los que no podemos sustraernos.
Día y noche, invierno y verano, frío y calor, despierto y dormido, consciente e inconsciente, sabido y no sabido, advertido e inadvertido, recuerdo y olvido, ánimo y desánimo, comprensión e incomprensión y más. Tantos pares de opuestos que se asocian al significado de este par de hexagramas 35 y 36 y acá sólo estoy haciendo una lectura de tantas lecturas posibles. Una que se asocia al solsticio de diciembre y a nuestro analemma solar.

36 La luz herida, oscurecida, inadvertida, oculta, eclipsada, tapada...

La veo así:

Todos los años es el mismo viaje en nuestro analema, el de cada uno.
Como al caminar el analema -en imitación del Sol-,  nos transformamos, lo que nos era conocido ahora es vuelto a conocer en sus nuevas formas.
Una y otra y otra vez y siempre es lo mismo, pero no es igual.
Es una aventura que nos propone el Sol y para esa aventura nos dota con caballos como dice el dictamen del 35.
Si a la vuelta del año volvemos con abundantes historias de nuestras hazañas aventureras para mayor gloria del Sol y con los caballos exhaustos, nos recompensa con caballos frescos para el año siguiente.
Las caballerizas del Sol son inagotables para los caballeros solares. ¿quién quiere participar?

Un poco en broma y un poco en serio. Así estoy hablando.

Sigamos. Marcamos puntos en el cielo sobre el analema que se dibuja en cualquier punto del Ecuador: el más alto, el más bajo y los dos medianos. Los solsticios y los equinoccios
Son los puntos para nuestro planeta Tierra. 
En realidad, es infinito por recurrencia e inconmensurable por dispersión.

Hay un analema para cada punto en la superficie de la Tierra, tenemos un analema personal, un camino solar, cada uno de nosotros. Ese con el que nacimos a la luz del Sol. 
El Sol, es decir, el Rey que nos otorgó los caballos con los que vivimos, crecemos y nos transformamos. La fuente de energía para todo lo que pulula en la superficie de este planeta, el Sol.

Este es el de Apolo -el dios solar de los griegos- sobre su templo, en Delfos

Como acá, en este blog y en Internet, somos humanos y acabamos de pasar por el punto más alto en el hemisferio sur y el más bajo en el hemisferio norte, celebramos otro ciclo del Sol sobre nuestro planeta Tierra. 
Al solsticio de diciembre lo hemos elegido el cumpleaños de Gaia, nuestra vieja y siempre joven Tierra. De un lado es invierno; del otro lado, es verano.

Nuestra Tierra siempre tiene una puerta al verano y la otra al invierno y, como es justa, se alternan y se igualan en los equinoccios. Para que todos tengamos caballos, esa fuerza animosa que nos da el Sol. 
Es decir, la línea blanda del 5º puesto del hexagrama 35, Prosperar. Que en una versión libre, como yo la siento, el Sol del 35 dice algo así:

"No es bueno que te tomes a pecho ganancia y pérdida, no es nada personal.  Llegas a emprender una aventura de la conciencia y habrá bendiciones que te ayudarán si te atienes a ello sin miedo."

La cuarta línea es la superior del trigrama Montaña y la central del trigrama Agua, los trigramas nucleares, atenerse sin miedo.

Como pueden ver, la cosa no se presenta tan sencilla, la mutación de la quinta del 35 lleva  al hexagrama 12, La Obstrucción.

"Hombres malignos no favorecen la perseverancia del noble"

De ahí que sea tan necesaria la fuerza animosa que nos otorga el Sol cuando nos recibe tres días en su presencia y nos regala esos caballos. ¿Quién dijo que sería fácil? Si fuera fácil, no necesitaríamos esos caballos.
Los hombres que tapan el sol en pleno día del hexagrama 36, esos que pretenden adueñarse del sol y sus caballos para siempre, necesitan por parte nuestra una tenaz resistencia. Porque viviremos en ese mundo oscurecido del 36 y tendremos que mantener el sol encendido adentro nuestro, como también dice el hexagrama 36.
Este es un mundo polar y los hexagramas tienen infinidad de lecturas, pero esta lectura de 35/36 es la apropiada para el final de un ciclo solar. En el hemisferio norte el Sol está débil, pero en el hemisferio sur no, esta fuerte. Los caballeros solares nos turnamos para reponer fuerzas.


Ahora, un amigo me lo dijo así:

"Arderá la memoria hasta que todo sea como lo soñamos"

-Paco Urondo.


Y agregó esta imagen; 

"la imagen de la recursión", agregó otro amigo. Lo Recursivo, otro nombre para el hexagrama 35.
La aventura sin fin.

Que sea con prosperidad; vitalidad, recursos y amor. 

No es tan difícil como parece, nos han otorgado gran cantidad de caballos, el Rey lo ha hecho. Honremos al Rey usando esos caballos con la intención con que nos fueron otorgados. 

Que con esta lectura veo que sería algo así: caminar nuestro analema solar una y otra vez y en ese camino progresivo prosperar como las plantas al sol. 
Las plantas descansan en invierno y prosperan en verano, crecen hacia arriba buscando la luz del Sol y hacia abajo, hacia la oscuridad donde está oculto nuestro propio Sol.
Hay un Sol en el cielo y hay un Sol interior, uno se vale del otro y el otro del uno. Para eso tenemos caballos, esa fuerza animosa que nos da el Sol del cielo que brilla para todos.
Este lugar donde vivimos todos es un Misterio maravilloso y la frontera sin explorar es interior. Allí está nuestra Última Gran Aventura por Tierras Extrañas. 

Persona

Cuando veo retratos como este o atrapo una expresión como esta en cualquiera que me rodea, que para mí puede ser conocido o no pero tan humano como yo, caigo en cuenta de la Gran Aventura que es nacer humano. No puedo decir cómo es que lo sé, sólo lo sé. Tal vez sea que en expresiones como esta se vislumbra el Sol interior, que lo puedo reconocer brillando allí.
Esa aventura es nuestro analemma, el camino del sol en nuestro cielo. El hexagrama 35, Prosperar..

Todo esto es para desear FELIZ AÑO NUEVO, pero también es porque acabo de descubrir, con mucha ayuda, algo más sobre el hexagrama 35 que me hace feliz compartir con ustedes.

Junto con el 36 muestra Lo Recursivo, el tambor de Shiva, el "ḍamaru (“bicónico”; “de cintura delgada”; “la intersección de dos triángulos opuestos”)":  https://hijodevecino.net/2015/03/04/el-doble-simbolismo-del-tambor-de-siva/.

Shiva, el destructor y transformador. 

El Tambor

Mano de Fuego

El tambor de Shiva
Resulta de volcar 180ºel hexagrama 35 y aparece el 36
Uno de tantos pares volcados que aparecen en sucesión en el arreglo del rey Wen.

Un número 8, un reloj de arena.

Para que la figura cierre y sea perfecta vamos a leer la segunda línea blanda, la central de Li, el Sol, en el hexagrama 36, La Luz Herida, que se complementa con el hexagrama 11. Impregnar.
Dice algo así en una versión libre, como si hablara yo, como la entiendo yo:

" Llevo una herida en mi muslo izquierdo que me hace difícil el caminar, una herida que no cierra, una herida envenenada. Pero tengo una gran fuerza animosa en mi interior que es tan fuerte como esa herida, una fuerza que me ayuda con la fuerza de un caballo: Vengo a comprender, sin odio"

La figura cerrada y completa es esta:

36.2-35.5 > 11-12

61
Centrar la Conformidad
Chung Fu

Li, Fuego, conciencia

Uno puede contemplar los signos y jugar con ellos. Siempre surgen significados más y más profundos. De esta manera El Libro de Todos los Nombres nos ayuda en nuestra aventura. Encontrarnos con él es una de las bendiciones del Rey de la quinta línea del 35.

Tal vez supongamos que las bendiciones y los milagros vienen a nuestro encuentro precedidas de un ángel con trompeta y luego de 20 años de rezos y promesas, pero no es así.
La mayoría de las veces nos pasan inadvertidas porque estamos encerrados en el 36, dormidos, inconscientes a las ofertas que están a nuestro alcance ahora, con una idea fija en la mente sobre lo que queremos, quienes somos, cómo tiene que ser nuestra vida.

Eso nos ciega a la solución que está en estirar la mano y tomar lo que sí nos ofrece la vida. No sólo queremos bendiciones y milagros, también los queremos elegir.
Así no funciona la cosa, estamos hechos a la medida de nuestro mundo como todo lo que hay acá.

Si nacimos es porque encajamos en nuestro mundo aunque nos parezca que no por las trampas de los Hombres malignos no favorecen la perseverancia del noble  y nos dicen cómo tenemos que ser y a quién tenemos que obedecer para satisfacer a sus necesidades y deseos.
No a esa ley que es igual para todos, sino a sus necesidades y deseos. Hombres que nos maldicen desde la cuna.

Mal decir significa eso, que nos dicen mal, que nos confunden.
Bien decir, bendición, significa que nos dicen bien, que no nos confunden, que nos guían hacia nosotros mismos.
Bendecir no es la palabra bendición, eso es sólo una palabra de 9 letras.

Una palabra que se usa muy livianamente y en la mayoría de los casos no va acompañada de palabras que nos guíen hacia nosotros mismos sino que nos encadenan en el 36, en la mazmorra donde vivimos como animales heridos aunque salgamos de vacaciones a las Bahamas cuando se nos de la gana.

El 35 da para seguir pero basta por ahora.


Alguien que ya dijo todo esto sobre el hexagrama 35 y el 36 -y no ha sido el único en decirlo- pero que a mí me parece una forma magistral, tan amable y amorosa de decirlo que quiero manifestar acá mi agradecimiento, Hayao Miyazaki en La Princesa Mononoke.

Cuando uno comprende en lo profundo de su ser, sin palabras, sin razonamiento, y lo inunda la gratitud; entonces algo se enciende adentro, se enciende el Sol interior.

Entonces uno baila la danza de Shiva -como todos-, pero ahora lo hace despierto; aunque no tenga noticia de qué o quién es Shiva.


Su nombre es CHIN, el 35 se llama CHIN.

¡FELIZ AÑO NUEVO! 

Que el Sol brille para todos

¡CHIN, CHIN!

;)

Por si no lo advirtieron, 35; 3+5= 8 ☝