Hexagramas 19 y 20, de cómo ponerse en el lugar del otro sin perderse a sí mismo y de cómo distanciarse de sí mismo para interpretar.

Hay un instructivo que está en este libro y es muy útil para no perderse a sí mismo en la unión y-también para interpretar las respuestas a las consultas personales.

Es el camino de líneas que mutan entre estos dos hexagramas y ha surgido de una pequeña conversación en el grupo I Ching de facebook con Alberto Viñuela Miranda.


El Acercamiento -hexagrama 19-, para poder mirar el árbol.        
La Contemplación, el distanciamiento -hexagrama 20-, para poder mirar el bosque.

"Que el árbol no te oculte el bosque". Eso es el hexagrama 20. Y también es bueno que el bosque no te haga pasar por alto el árbol. Esto es el hexagrama 19

árbol-y-bosque

Como se puede ver a simple vista, las que mutan son las  líneas 1-2 y las 5-6.

Hexagrama 19

Hexagrama 20

Ven que por un momento infinitesimal se puede visualizar al hexagrama 61, La Verdad Interior, formándose y diluyéndose al moverse las cuatro líneas en ambos hexagramas.

Hexagrama 61

No comentaré esta mutación, lo dejo a cada uno.

Está bien, van algunas ideas para comenzar:

El instructivo está en los dictámenes y las imágenes y en las cuatro líneas de ambos hexagramas que te permiten ir y venir del uno al otro.

La Secuencia del 19 al 20 también es una gran ayuda y la interpretaré. Transcribo la versión de Ritsema-Karcher:

Ser grande por-ende después permitiendo la Contemplación.
La anterior aquiescencia tiene el uso de la Contemplación

Ser grande son las dos líneas luminosas que entran desde abajo en el heagrama 19.

Ser grande tiene el significado de alguien que es capaz de guiar su propia vida, es decir, alguien que ha dejado la guía de la tribu, se ha individualizado, vive como piensa y piensa como vive. Guía su propia vida, es autónomo en todo sentido. Alguien que se ha conformado a sí mismo.
El trigrama inferior e interno del 19 es Tui, el Lago, el contento, la conformidad. El superior es Tierra; flexible y domesticada. La imagen de Tierra es la vaca; dócil, servicial, resistente, confiable, disponible para su uso.
Contentado en sí mismo y disponible para la acción en el mundo. La combinación hace de este sujeto una persona que no busca para sí porque ya tiene lo que necesita -Tui abajo-, pero está disponible para ayudar si así se lo requieren. ¿Por qué está disponible? Eso se explica en las dos líneas yin superiores del hexagrama 19. Si las leen lo sabrán.

Esto es lo que nos aporta la secuencia, que suele ser una parte del texto que se usa poco y como ven puede ser bastante jugosa.

Las dos líneas fuertes de abajo del 19 se acercan una a la otra para entrar en acción. Una se acerca porque la otra también lo hace. Esto se expresa como acercamiento conjunto y es una característica muy importante del proceder del sujeto que se describe en este hexagrama. No es el Ir al encuentro del hexagrama 44, que te aborda con descaro.
Es alguien que baja para acercarse a ayudar a otro que está subiendo. Ambos son activos, dos líneas yang luminosas. El superior no está arrastrando al inferior, sólo le tiende una mano para ayudarlo en su subida. Imagino un escalón muy alto, al de abajo en dificultades para subirlo y pidiendo ayuda y al de arriba bajando a ayudarlo. ¿Ven cómo?. Es una ayuda circunstancial, porque el otro se esfuerza y pide ayuda y el de arriba está disponible para ayudar y le da un tirón para arriba. Como si escalaras una montaña con un  guía y en ese momento necesitas que baje a ayudarte.

Ya tenemos la mutación andando en el 19, las dos líneas yang de abajo y las dos yin de arriba.

Esta es la condición de aquel que se acerca a ayudar en el 19 y esa condición también es la que le permite Contemplar, es decir , distanciarse para ayudar sin quedar pegado y estar así disponible para ayudar a otros o en otra oportunidad.

Otras indicaciones:

Hay correspondencia entre las líneas segunda y quinta en ambos hexagramas aunque hay una línea yin en puesto impar y a la inversa. Es cuando blando en puesto firme y firme en puesto blando son lo que es correcto en este caso.
Cualquier regla se subordina al símbolo, siempre el hexagrama es el que manda por encima de cualquier regla.
En ambos hexagramas la segunda sigue en imitación a la primera sobre la que se posa, la quinta toma como modelo a la sexta que la cubre. Primera y sexta están fuera de la vista, pero están.
Esto se comprueba al leer las líneas y es algo que se debe hacer por cuenta propia si se quiere aprender a usar este libro.

Ahora corresponde interpretar la mutación inversa, del 20 al 19. Porque ¿cómo es que esta persona del hexagrama 20 se involucra en las cuestiones mundanas en el hexagrama 19?

Hay que empezar por entender la motivación del hexagrama 20, qué sucede en las líneas, cómo es el sujeto que nos describe el dictamen, qué vemos al estudiar los trigramas. Acá no tenemos una secuencia que nos ayude.

Pego una entrada del hexagrama 20 donde hay pistas:

http://abatesoderini.blogspot.com.es/2011/06/el-i-ching-un-libro-ilustrado-y-el.html

Otra pista, las dos líneas luminosas de arriba en el hexagrama 20 no olvidan cuando estaban en la situación de las dos líneas oscuras de abajo.
También estamos recordando en el 20. Recordando para re-conocer lo que está aquí y ahora en el mundo. Y, en esa dirección, el lago del 19 también es el reservorio al que nos acercamos para tirar del recuerdo que necesitamos ahora.
El hexagrama 20, La Contemplación, es el hexagrama del ahora, presente y despierto en el ahora. No hay enjuiciamiento, no hay pre-juicios ni ideas prefabricadas al contemplar el ahora. El ahora es el ahora y es completamente nuevo y único. Eso es lo que hay y puede ser parecido, pero nunca será igual. Como nunca es igual es mejor contemplar desprejuiciadamente. Si contemplas con prejuicios no puedes reconocer lo nuevo porque lo guardas en la misma bolsa que a lo viejo.
Cada vez que contemplas desde lo alto el mismo panorama en el hexagrama 20 ves algo que nunca viste antes y no sólo por los cambios en el paisaje; también porque no lo viste antes, porque el que está mirando ahora también es otro y puede ver algo que antes no veía. Por eso es mejor no dar por sabido nada nunca. Ser un eterno ignorante, un aprendiz a perpetuidad que mira el mundo asombrado porque siempre es nuevo.