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Para un seis en el segundo puesto de La Visión, el hexagrama 20.

Experimentar visiones y generarlas es el significado mas abstracto del hexagrama 20. La Visión. 

Abajo, en el mundo del pensamiento, se experimentan. Arriba, en el mundo de la acción, se generan. La acción conjunta de la segunda y la quinta líneas es el reconocimiento mutuo entre el rey de la quinta y el adolescente receptivo de la segunda. Veamos cómo se llega a entender esto. Lo dividiré en dos artículos para facilitar el ejercicio para mí y para los lectores. 

Hexagrama 20, La Visión. 

Lo que está mostrando el signo es la luz del reino, nuestra mente discriminativa, dos barras brillantes, los hemisferios cerebrales, que iluminan a la multitud oscura, a la forma de abajo. Arriba el trigrama Viento, abajo Tierra. 
El viento planeando sobre la tierra seca levanta polvo y lo traslada de acá para allá y de allá para acá. El polvo viaja, la forma viaja y encuentra imágenes distantes, de otros tiempos y lugares semejantes a este.

Semejantes, no iguales. No es la memoria de datos. No es causa-consecuencia, no es lógica. Es analógica. 

Cómo se experimentan las visiones al decir del dictamen de esta línea:

Para un 6 en el segundo puesto de La Visión:

Contemplación furtiva a través del resquicio de la puerta. La determinación es favorable para una doncella.

Esta es una línea muy interesante, el puesto es central en el trigrama inferior, el puesto y el carácter de la línea son yin y está en correspondencia con la quinta línea yang en puesto yang. Mejor correspondencia, imposible. 

La línea habla de una doncella, una mujer púber, por eso es doblemente yin. Y es tres veces yin por el puesto que ocupa en el centro del trigrama inferior Tierra. No importa si se trata de un hombre o una mujer o la edad que tenga, la descripción del personaje está enfatizando el carácter receptivo del trazo y su actitud.   

La visión no es generada ni experimentada por el ojo, en el hexagrama no está Li, El Fuego. Están Tierra abajo y Viento arriba. El dictamen del Signo habla de un momento, fuera del tiempo y del lugar, de completo recogimiento interior, en el que uno lava sus manos antes de una ceremonia religiosa. El de La Imagen nos dice de los viajes de antiguos reyes para conocer las costumbres del pueblo y establecer la enseñanza. 

Dos imágenes que intentan trasmitir al lector y estudiante cómo se vivencia y cómo actúa el signo respectivamente. Las manos, la montaña y la enseñanza lógica y conceptual aparecen cuando muta la quinta línea. El agua del aguamanil, las costumbres y la enseñanza de la vivencia, existencial, cuando muta la segunda línea. 

Hexagrama 59, La Dispersión.
El Viento planeando sobre el Agua la levanta como vapor y genera energía.
Este es el resultado de la mutación de la segunda línea.

La visión se experimenta con un oído interior, Agua es el oído y es el corazón. También es la luna y puede entonces experimentarse como sueños, recuerdos, intuiciones o premoniciones que aparecen a la consciencia en forma de imágenes o combinaciones o patrones que se repiten

Se vincula a la capacidad de imaginar, al despertar de la imagen interior. La creatividad, la resolución de problemas, la inventiva, el arte, todas son expresiones de nuestra capacidad de imaginar y están acá, en la segunda línea del hexagrama 20, La Visión, mutando al 59, La Dispersión.

Es decir que, en su interior, el sujeto de la segunda, que puede o no ser también el de la quinta, está en un momento de total receptividad, completamente abierto a recibir lo que ingresa como pregunta por el trigrama exterior arriba. El Viento que levanta polvo en el hexagrama 20.

La descripción de ese momento fuera del tiempo en que entra la pregunta y sale la respuesta imaginada, es fácil de comprender si uno es imaginativo. Para mentes más racionales esa experiencia puede ser escasa y no haber sido nunca registrada por la consciencia. 

Una mente muy racional recuerda fechas, nombres, párrafos enteros de los libros que ha leído, algo que para una mente imaginativa es imposible hacer. Todos tenemos las dos mentes, pero es difícil que se balanceen y se moderen entre sí. Por cuestiones culturales siempre aplicamos más atención a desarrollar las habilidades de nuestra mente racional de Fuego y descuidamos la visión de la imaginación de Agua.

Los comentarios describen ese momento fuera del tiempo y del lugar como la imagen de una garza mirando un lago. Si la garza mirando el lago no está en el banco de imágenes de la propia experiencia, no nos dice nada. Pero si lo hemos vivenciado. nos dice mucho. 

No hay pensamientos que estorben en la segunda línea, está en modo receptor. En ese momento no hay juicio ni ponderación ni comparación ni memoria y al momento siguiente se presenta la imagen. Clan! Eureka! Es una visión fugaz y parcial, como la que vemos por el resquicio de una puerta. Un atisbo, una imagen congelada, como una fotografía. 

En ese momento en que "ve" la imagen, esa doncella sale de su ensueño y corre hacia su sostén con la determinación de Agua. Porque la imágenes son fugaces como sueños, y si no las subimos a la conciencia para que ocupen el lugar que les corresponde, se desvanecen, "se me fue la idea".

Es decir, que afloren a la conciencia racional que la recibe en el quinto puesto de Viento mutando a Montaña. Como digo, la correspondencia entre ambas líneas, la segunda y la quinta, en este hexagrama es perfecta. 

También pueden ser rechazadas por el ministro de la cuarta línea que siempre las encuentra de origen sospechoso. No son científicas o son demoníacas o descabelladas o fantasiosas o emocionales. Todo depende de cómo sea la mente racional y si está habituada a trabajar con la mente analógica como dos caballos uncidos al mismo carruaje que se llevan bien, como una pareja bien avenida.

Que opine que la cosa no parezca tener una relación causa-efecto,  porque esa relación es como la describe el hexagrama 20, es una consecuencia de la visión limitada y unilateral de la mitad racional de nuestra mente. Ambas son unilaterales si funcionan desconociéndose la una a la otra, y son la pareja perfecta si funcionan juntas. Por eso Viento, la mente discriminativa, tiene dos líneas yang.

Como vimos arriba, cuando esta línea muta se presenta el hexagrama 59, La Dispersión. Qué mejor que el amplio panorama que presenta ahora La Dispersión. La Dispersión es el Viento arriba evaporando el Agua abajo, un cambio de estado de líquido a gaseoso que libera energía, separa las cosas y las hace nítidas. Como el viento disipando la bruma que se ha formado sobre el mar.

En el estado de La Dispersión actuando, se puede ver a la distancia. Desaparecen los límites, las fronteras y también las paredes que se habían levantado para ocultar la intimidad, de ahí la facilidad para el reconocimiento mutuo y el viaje que cruza los mares

El trigrama Agua que se forma abajo con la mutación es el trigrama de los afanes, es terco y determinado y no le gusta que otros le digan por dónde tiene que ir. Un caballo que atasca el freno y se resiste cuando quiere correr y no lo dejan y siempre será algo indomable. Que necesita de una mano firme y suave que lo acepte como es, que lo respete. Que la cuarta del 20 no mute en simultaneo con la segunda.

Entonces, la línea espejo de la segunda del 20 es la segunda del 59. Siempre es esa y ninguna otra, es un camino que se recorre en ambas direcciones.

Para un 9 en el segundo puesto del hexagrama 59, el dictamen dice:

Dispersión. Corre hacia su soporte. El arrepentimiento se desvanece.

Corre porque el nuclear inferior del 59 es el trigrama Trueno, el pie que se adelanta y también una carrera veloz. Su soporte es el trigrama superior Viento, que también tiene el significado de un cordel que puede servir para tender la ropa a secar por separado y para atar con firmeza las cosas que antes estaban separadas. También está Montaña en el nuclear superior, son las manos del oficiante, el que genera las imágenes, las está lavando para descartar sus prejuicios.

Las imágenes que aparecen corren hacia afuera y arriba para no perderse, para sostenerse y manifestarse de alguna manera. Escribir, hablar, crear, hacer.

Cuando la segunda y la quinta de La Visión mutan al unísono aparece el hexagrama 4, El Joven Necio, que da consejos para el que enseña y el que aprende. Pero será una cuestión de la próxima entrada.


Para los textos de los dictámenes en cursiva he usado en este artículo la traducción al español y comentarios de Daniel Bernardo, de la versión del Yi Jing con comentarios de Cheng Yi y Zhu Xi. (2024). 

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