Hexagrama 15, Mantenerse Entero.

 El signo yang, La Modestia. 

La Modestia se conoce a sí mismo, ha reconocido su espíritu salvaje irreductible a cualquier enculturación. Por eso se mantiene bajo, para cuidarse muchísimo. Usa ese espíritu para mantenerse entero, mientras circula en silencio y sin afectación por cualquier sociedad humana, en cualquier lugar del mundo.  Aprende donde va y comparte con quien está.

Al trazo yang de su figura lo comparten tres trigramas, los tres hijos. Todas las demás son líneas yin, receptivas. 

Ese trazo está rodeado de líneas yin en todas direcciones, como si fuese un vendedor callejero de cacharros de barro que grita su mercancía mientras camina, porque está Trueno, el que camina. Alguno comprará para su uso particular, que ignora y que no necesita saber para hacer su oficio, porque está Agua que hace sin razón, para expresarse, porque ahora está dentro de un ser vivo que puede crear, un hombre. Agua no dejará pasar esa oportunidad con tanta Tierra arriba a su disposición. Él obedece a su dirección interior, porque está Montaña abajo, la que tiene la luz instantánea y ve lejos, hacia el futuro y hacia el pasado.

También se puede ver como una prole numerosa, muchos hijos de cualquier tipo, una gran creatividad. La voluntad dirigida en el tercer puesto reúne a Montaña, en el trigrama componente inferior.  Agua en el trigrama nuclear inferior y Trueno en el trigrama nuclear superior. Esa es la voluntad que lo dirige, una unión de fuerzas yang compartidas en ese único trazo yang. 

La fuerza yang del tercer puesto del hexagrama 1, Lo Creativo, es la de ese hombre que trabaja en su obra todo el día y hasta altas horas de la noche, con la preocupación de haber perdido su camino, su Sentido, su Tao. Una intensa actividad creativa que también se muestra en todas esas líneas yin que lo rodean en el hexagrama 15. 

La eficiencia energética y el equilibrio del trazo yang es máxima, está situado antes de sobrepasar el centro de la figura, es decir, que mantiene abajo el centro de gravedad del cuerpo, pero no está "montado", como el general del signo 7, El Ejército, que muestra el Kiba Dachi del Karate. No es una posición de ataque. Es algo como la posición base del Tai Chi, que logra un balanceo y equilibrio perfecto al ir y venir de ella.

 

Esa posición se logra separando las piernas el ancho de hombros del cuerpo, manteniendo los pies paralelos entre sí, dirigidos hacia adelante y perpendiculares al segmento del ancho de hombros. Las rodillas están ligeramente flexionadas para bajar el centro de gravedad. La cabeza, el torso y los brazos "penden" de un hilo imaginario que sale de la coronilla de la cabeza. Ese hilo imaginario lo sostiene unido al Cielo y lo endereza. Las piernas, ligeramente flexionadas, lo une a Tierra. Como una marioneta animada, viva, pero obediente. 

Al adoptar esta posición y ejecutar la rutina, uno hace modesto su cuerpo. Porque el cuerpo no pesa sobre las piernas, está colgado, es liviano. Y los movimientos no se exceden, son modestos y armoniosos. Todo es modesto en el Tai Chi y así hay lugar para que todos lo ejecutemos juntos, porque nadie se excede e invade el espacio ajeno.

La posición y los movimientos del Tai Chi dicen mucho de la filosofía que la informa, de su idea del lugar del Hombre entre Cielo y Tierra. Es la misma filosofía del I Ching, la misma idea. El Modesto es el humano ideal de esta filosofía. No se acaba su estudio con nada que podamos decir de La Modestia, pero siempre podemos ir un poco más allá cada vez que la estudiamos.

El Modesto es un egresado de la escuela del 4, El Joven Necio. Es el de la tercera línea, cuando los maestros de la segunda y la sexta ya están en su pasado. Alguien que le dijo que sí a todos los maestros de la escuela, porque se interesó en todo lo que tenían para mostrar. Fue un alumno sin penas ni glorias y luego hizo y hace lo que le dice su espíritu salvaje irreductible a la enculturación. El de Trueno, que está en su estructura.

Por eso es un autodidacta, el que sigue su propio plan de estudios y a su propio ritmo. El que tiene decenas y cientos y miles de maestros, pero no se casa con ninguno. Porque solo son amoríos más o menos intensos y cada uno deja su enseñanza. Algunos de esos amores son memorables y nunca se olvidan, pero el autodidacta es promiscuo en amores, no quiere perderse de nada. Total, que el conocimiento no ocupa espacio y es liviano, está guardado en la bolsa de El Receptivo y aparece cuando se necesita como líneas ocultas.

La tercera línea habla del modesto. Las distintas traducciones lo dicen de distinta manera y eso amplia la comprensión. Que es modesto y trabajador, que actúa esforzando la modestia, que somete a sus plebeyos, Somete a sus plebeyos porque busca lo no desarrollado dentro de sí para que le sea útil, es decir, desarrollar su potencial para aumentar su autonomía.

Que posee la consumación, están todos los trigramas del signo Brotar presentes, es la consumación de ese proyecto de Humanidad del 3, la forma perfecta de supervivencia de la especie. Montaña abajo, Agua en el nuclear inferior, Trueno en el superior y Tierra arriba. Una posición protegida, estable y flexible que facilita simplificando la vida y consumándola. Es decir, que el modesto consuma en sí mismo, realiza lo que está en su potencial al nacer.

La Modestia funda su propio reino donde sea que vaya, donde sea que esté es el rey de sí mismo, porque tiene fortaleza de carácter. Así, el modesto es amigo de todo el mundo y la tierra es su casa.

Nunca busca los problemas, pero le pueden llegar, porque su apariencia engaña a los abusadores. Por eso es mejor que sea prevenido y se ejercite en técnicas de autodefensa, tanto espirituales como emocionales, mentales y físicas. Para permanecer entero y sano.

Siendo que, desde tan joven, cuando tenía 14 años, ya sabía para qué estaba vivo, nunca dudó de ninguna decisión y no se arrepiente de ninguna. Toda decisión tiene un costo y al modesto no le importa pagar el costo de ninguna de ellas. 

De cualquier manera, siempre lo puede hacer por sí mismo, usando sus dones y recursos que son muchos. Está la mano hábil, el corazón perseverante y el pie que avanza, está que es uno más en la multitud y entonces no destaca. Con tanta energía yang en ese puesto, puede saltar como un resorte que se suelta y pasar al trigrama superior en un instante, sorprendiendo a todos. 

Al modesto todo le resulta fácil porque elige lo simple y lo liviano.

De qué otra forma se puede vivir con integridad, respetando esa parte del propio espíritu salvaje irreductible a la enculturación, permanecer entero?. 

Esa parte que pertenece a Chen, Trueno, está en el nuclear superior y es la que nos salva a todos en las crisis, porque Chen es el único que puede actuar fuera de la caja de la cultura donde nació con fuerza aplicada a un fin. Es el fundador y el que explora y coloniza en la primera línea del hexagrama 3, Columna de Piedra, el que establece el proyecto. Y el que lo rescata cuando se presentan el temblor y el temor en el hexagrama 51, Trueno. 

Agua no puede, aplica su fuerza a expresar sus sentimientos en el ahora, con el obrar y el intentar. Montaña tampoco, porque aplica su fuerza dentro de la cultura donde nació y fuera de ella es lo desconocido. Tierra, el otro trigrama presente en La Modestia, no tiene voluntad propia, necesita guía y la encuentra en Chen, que sale a su encuentro desde el tercer puesto. Entonces, El Modesto también es intuitivo.

Las dos líneas yang del hexagrama Brotar se han unido en el tercer puesto del signo El Modesto, ambos signos están formados por los mismos trigramas que han cambiado de posición. Tierra sube, Agua con Montaña bajan y se juntan con Trueno que sube. Se unifican las líneas yang de los tres hijos de Tierra y la sostienen arriba. Algo que se asemeja conceptualmente a Cielo sosteniendo a Tierra en el signo Tai, La Paz.

Autodidacta y sin prejuicios, desarrolla su potencial para aumentar su autonomía y lo consuma, no busca destacar pero no se reprime de actuar y hacer desde su interioridad, elige lo simple para simplificar su vida, alivianarla, es previsor y precavido -flexiona las rodillas- pero puede liderar en las emergencias, conoce muchas culturas por haberlas explorado, es creativo e intuitivo. Así, leyendo el signo, vamos encontrando las virtudes de La Modestia que tanto se ensalzan en la cultura que creó este libro.

Cuando la tercera de La Modestia resulta de un 9, se produce su mutación al hexagrama 2, Lo Receptivo. Y esa línea de Lo Receptivo, mutando a La Modestia por un 6, agrega más información.  

Son las "líneas ocultas" que maduran en silencio evitando interferencias y que se disparan como flechas luminosas al mutar a yang en la tercera del signo. Que contienen gran claridad y nadie sabe de dónde han salido. Ni el que las lleva consigo las conoce por adelantado, porque están guardadas en la bolsa  de Lo Receptivo. 

La Modestia brilla con luz propia, porque el modesto se mantiene entero, sin interferencias, y lo que sale de él es auténtico. Una creación personal de Lo Receptivo en un hombre que vive con los preceptos de La Modestia.

Por eso la tercera línea del hexagrama dos dice, no busques obras, llévalas a cabo. Porque no existe la intención de realizarlas, se hacen porque las flechas salen disparadas desde las líneas ocultas y El Receptivo se deja guiar, en ese momento de tiempo inspirado, por El Creativo. Así surgen todo tipo de obras originales al mundo humano.

Acá hay una pista -una línea oculta-, para entender la sexta línea del signo El Receptivo y la voy a seguir, porque ahora la veo.

La sexta del 2 es la que está buscando la obra porque el Tao de Lo Receptivo se ha agotado. El Tao de Lo Receptivo es dejarse guiar, no es aplicar voluntad dirigida, es dejarse guiar. Aplicar voluntad dirigida es el Tao de Lo Creativo. Lo que nos dice la sexta de Lo Receptivo es que el tiempo inspirado del tercer puesto se agotó, que se ha completado un ciclo de luz. Muta al signo 23.

Hexagrama 23, La Desintegración.
La luz se está retirando de El Receptivo.

El hexagrama 23, La Desintegración, muestra el agotamiento del ciclo inspirado. Y en su sexta línea nos dice que hay un fruto aún no comido. Que se puede cargar el carro si uno lo tiene, el carro para llevar con uno es una alusión a El Receptivo. Significa que seguiremos estudiando, viviendo y pensando y otros frutos madurarán y se iniciará inadvertidamente otro ciclo inspirado en el hexagrama 24, cuando retorna la luz.

El Receptivo tiene una manera de crear en el hombre que no es la de El Creativo. Solo puede crear en ciclos inspirados de luz. Por medio de su tercera línea, la que baila su música y termina en El Modesto, y su cuarta línea, la que se dispara cuando la bolsa de memorias se abre súbitamente y mete un gol en El Entusiasta.

Porque, como dice la Secuencia, El Modesto (15) que posee lo Grande (en la quinta línea yin del 14), es naturalmente El Entusiasta (16)